¿Sabes cómo puedes utilizar mejor la retroalimentación del cliente?. Estas son las tres mejores prácticas que te ayudarán a convertir tus datos en elementos accionables gracias a que tendrás las bases para tomar mejores decisiones.
1.- Basa la mejora de experiencias obteniendo retroalimentación del cliente
La mejora de la experiencia del cliente comienza con la recopilación de los comentarios de los clientes. Dependiendo de una variedad de factores, puedes recopilar esa información a través de encuestas de satisfacción del cliente.
Recuerda que la retroalimentación de los clientes se convierte rápidamente en una gran cantidad de datos. Si tratas cada pieza de retroalimentación como un ladrillo, poco tiempo después tendrás un desorden que habrá que ordenar.
Parado sobre esa pila de ladrillos, no sólo puedes ver una enorme cantidad de datos, sino también una cantidad infinita de posibles respuestas.
Para mejorar la experiencia del cliente, primero tienes que empezar con una meta y un objetivo. Eso servirá para organizar todo de una manera más eficaz.
En otras palabras, ¿qué estás intentando construir? Si conoces la estructura que quieres, serás de capaz de determinar sobre qué piezas de retroalimentación actuar, cuándo actuar y cómo encajan estos datos en el resultado final.
Checa estos elementos que conforman la satisfaccion al cliente.
2.- Encuentra ideas accionables que impulsen el cambio
Si estás volviendo a tener dificultades en tu experiencia del cliente, considera la opción de recibir ayuda para la gestión de datos y para crear las estrategias necesarias que faciliten la experiencia del cliente. Puedes hacer uso de algunas plataformas para escuchar la voz del cliente. Lo ideal es que le brindes a tus consumidores la oportunidad de expresarse a través de diversos canales. Apóyate en las diversas herramientas para llevar a cabo una investigación y conocer más a tus consumidores.
Te recomiendo leer: Cómo presentar datos de investigación que inspiren a la acción.
3.- Recuerda enfocarte primero en cosas pequeñas
Es un hecho que para lograr la experiencia del cliente se necesita tiempo, energía y compromiso para convertir la retroalimentación del cliente en algo único y atractivo para los clientes actuales y futuros.
Como con cualquier cosa que valga la pena, la clave es enfocarse en acciones pequeñas y significativas y comprender su importancia en el panorama general. Tarde o temprano, el trabajo será evidente.
En cada acción, recuerda apreciar el trayecto del cliente, al igual que al equipo que trabaja para ofrecer una experiencia del cliente de calidad.
Por último te dejo algunas ideas sencillas para una mejor experiencia del cliente.