El análisis comparativo es una estrategia ampliamente utilizada en diversos campos de la ciencia y la investigación de mercados, pues permite establecer relaciones entre dos o más fenómenos o conjuntos de elementos para obtener razones válidas en la explicación de diferencias o semejanzas.
En este artículo, te presentaremos en qué consiste el análisis comparativo y cuáles son algunos de los elementos principales que debes tener en cuenta si deseas utilizarlo para tus estudios.
¿Qué es el análisis comparativo?
El análisis comparativo es un método de investigación, recolección y análisis de información que consiste en la comparación de dos o más procesos, documentos, conjuntos de datos u otros objetos.
Los métodos comparativos se han empleado en investigaciones cuantitativas y cualitativas de fenómenos tan diversos como el lenguaje, la organización política, las relaciones económicas, la religión, el parentesco, el matrimonio y la familia.
La comparación ha constituido el núcleo de la antropología, la sociología y otras ciencias sociales. El análisis de patrones, el filtrado y el análisis de árboles de decisión son formas de análisis comparativo.
En la investigación de mercados, se utiliza como un método para analizar a los competidores y comparar cómo se comporta tu marca o producto en relación con la competencia.
Las empresas utilizan el análisis comparativo como forma de identificar sus posiciones competitivas y sus resultados operativos durante un periodo definido.
Conoce las ventajas de hacer un análisis de la competencia.
¿Para qué sirve el análisis comparativo?
En general, el análisis comparativo desempeña varias funciones importantes que están estrechamente relacionadas entre sí, como son:
- Mejora la comprensión de la propia organización al situar sus estructuras frente a las de otros sistemas.
- Aumenta la conciencia de otros sistemas, culturas y patrones de pensamiento y actuación.
- Pone a prueba las teorías en diversos contextos y evalúa el alcance y la importancia de determinados fenómenos, contribuyendo así al desarrollo de una teoría de aplicación universal.
- Evita que los estudiosos generalicen en exceso basándose en sus propias experiencias, a menudo idiosincrásicas.
- Proporciona alternativas y soluciones de problemas que pueden facilitar o revelar una salida a dilemas en una organización.
Las comparaciones espaciales (transterritoriales) deben complementarse siempre que sea posible con una dimensión longitudinal (transtemporal) para tener en cuenta que los sistemas y las culturas no están congelados en el tiempo, sino que cambian constantemente bajo la influencia de los procesos de transformación.
La combinación de estudios transversales y longitudinales ayuda a comprender estos procesos de transformación y pone de manifiesto que los distintos contextos afectan a los resultados de manera diferente.
Ventajas y desventajas de análisis comparativo
Algunos de las ventajas principales de usar el análisis comparativo como diseño de investigación residen en su capacidad para:
- Introducir variables explicativas adicionales.
- Permitir la variación de variables que toman un valor fijo en el caso inicial de interés.
- Demostrar que las relaciones son más o menos generales de lo que se había pensado inicialmente.
Sin embargo, esta estrategia también presenta algunas desventajas, como son:
- Requiere la conmensurabilidad de los conceptos entre los casos.
- La introducción de nuevas variables conlleva también la introducción de variación desconocida y que, como toda investigación no experimental, tiene que basarse en la «variación natural», que descarta muchas combinaciones de valores de interés para el investigador.
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Tipos de análisis comparativo
Generalmente, se distinguen cuatro tipos de análisis comparativos de acuerdo con la clasificación del sociólogo Charles Tilly:
- Individualizador. La comparación individualizadora contrasta un pequeño número de casos para captar las peculiaridades de cada uno.
- Universalizador. La comparación universalizadora pretende establecer que todos los casos de un fenómeno siguen esencialmente la misma regla.
- De búsqueda de variaciones. La comparación que busca la variación pretende establecer un principio de variación en el carácter o la intensidad de un fenómeno examinando las diferencias sistemáticas entre los casos.
- Abarcador. La comparación englobante sitúa diferentes instancias en varios lugares dentro del mismo sistema, en el camino de explicar sus características en función de sus diferentes relaciones con el sistema en su conjunto, por ejemplo, el análisis del sistema mundial de Wallerstein.
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Estrategias para la realización del análisis comparativo
Ahora que ya conoces qué es el análisis comparativo y cuáles son sus aplicaciones principales, te presentaremos 3 estrategias para realizar un análisis como este:
Comparación ilustrativa
La comparación ilustrativa es la forma más común de análisis comparativo y ha sido empleada ampliamente por teóricos de diversos campos.
Los ítems se utilizan como ejemplos para explicar o ejemplificar fenómenos encontrados en diferentes unidades.
Se eligen por su valor ilustrativo y no se seleccionan sistemáticamente para que sean estadísticamente representativos.
Las comparaciones ilustrativas se utilizan en reconstrucciones históricas y para apoyar interpretaciones o afirmaciones generales. Los estudios de casos de la investigación etnográfica suelen justificarse como fuente de comparaciones ilustrativas.
Comparación completa o del universo
La segunda estrategia es la comparación completa o del universo, en la que todos los elementos del dominio dentro del estudio, definidos geográficamente (por ejemplo, global o regional) o tópicamente (por ejemplo, conceptos analíticos o instituciones), forman las unidades de comparación.
Las encuestas etnográficas regionales exhaustivas y los análisis de temas concretos (como los indicadores de salud de la población nacional de los informes de la Organización Mundial de la Salud) emplean este enfoque.
Comparación por muestreo
Por último, la comparación por muestreo delimita estratégicamente una parte del conjunto, con el objetivo de seleccionar datos que sean estadísticamente representativos de las variaciones dentro del conjunto y que sirvan de base para las generalizaciones estadísticas.
Los estudios de este tipo son menos comunes en la antropología, pero abundan en la sociología y la geografía social.
Pasos para realizar un análisis comparativo
A continuación te presentaremos los pasos más importantes para realizar un análisis comparativo:
1. Define objetivos e indicadores clave. Selecciona el proceso que será objeto de análisis, identifica el objetivo del estudio y la métrica que será útil para alcanzarlo.
2. Identifica los elementos que vas a comparar. Según el tema, el área de trabajo o el objetivo, haz una lista de los elementos que se compararán como parte de la investigación.
3. Recopilación de los datos. Según el área o tema que vayas a comparar y evaluar, haz uso de herramientas para recolección de datos, desarrolla los criterios para la investigación de fuentes secundarias y asegúrate de realizar una extensa revisión de literatura.
4. Analiza y estudia las diferencias. En este paso se realiza el análisis de los datos recopilados, verificando que sean comprensibles y útiles para el objetivo del estudio.
5. Busca tendencias. Una vez que tengas la recopilación de los datos durante un periodo de tiempo, podrás identificar tendencias, las cuales suceden cuando tus indicadores evaluados presentan incrementos o disminuciones.
6. Interpretación de los resultados. No olvides lo que todos esos números que estás comparando representan. Analizar y comparar fortalecerá esas áreas de oportunidad que requieren más esfuerzo, cambios o mejoras en el proceso.
¿Quieres aplicar el análisis comparativo en tus proyectos?
Como puedes ver, el análisis comparativo representa una estrategia ideal para conocer las mejoras que puedes implementar para una marca o una organización partiendo de lo que ya existe en el mercado.
Por ejemplo, una forma de implementarlo en una organización es a través de una evaluación comparativa o benchmarking, que permite comparar los procesos empresariales propios con los mejores de la industria, obteniendo ideas para hacer las cosas de forma más rápida, menos costosa y más efectiva.
Sin embargo, basarte únicamente en prácticas de la competencia puede no ser totalmente satisfactorio para tus consumidores, por lo que siempre será recomendable que puedas realizar una investigación de mercado en forma que te ayude a conocer lo que tu audiencia meta necesita y desarrollar estrategias efectivas para brindar soluciones más adecuadas.
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